Lección de deportividad sostenible
El Porsche Taycan, máximo exponente de la movilidad eléctrica, plantea un extenso abanico de versiones formales y motrices (de 408 a 761 CV), y promete recorrer hasta 511 km seguidos
El apellido Porsche abre puertas y genera elevadas expectativas. Por eso, cuando la firma de Stuttgart anunció su intención de dar el salto tecnológico a la impulsión eléctrica muchos enarcaron las cejas, en una mezcla de desdén y curiosidad, mientras algunos cargaban la escopeta. Para sorpresa de unos y frustración de otros, el resultado causó respeto y admiración por igual. Se llama Taycan y es un supercoche de cinco metros, con cinco puertas y hasta cinco plazas, una máquina de precisión que imparte una lección de deportividad sostenible a revalidar por el próximo Macan eléctrico.
Su repertorio plantea un formato de carrocería con estilo cupé y otro de zaga algo más voluminosa y capaz. Esta silueta, acorde a destinos familiares, comparece a su vez en dos estilos: Sport Turismo y Cross Turismo, con cierta inspiración campera. La gama propone un total de catorce versiones, fruto de la combinación de las tres siluetas con las distintas asociaciones de motor y batería.
El abanico comienza con el bloque de 408 CV, vinculado a un acumulador de 71 kWh para obtener 444 km de autonomía. En segundo término, aparece la variante con batería más capaz, de 83,7 kWh, que procura 476 CV (504 km). En ambos casos, la potencia se remite a las ruedas posteriores.
La nómina contiene otras cinco interpretaciones sucesivas, con rendimientos en ascenso (530, 571, 598, 680 y 761 CV). Todas instalan un motor por eje y tienen cuatro ruedas motrices. La autonomía oficial alcanza 511 km en el mejor de los casos. Las prestaciones aumentan de manera vertiginosa, hasta acreditar una capacidad para brincar de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos.
Refinado y superdotado, el Porsche Taycan cubre una horquilla económica muy extensa. Su tarifa oficial discurre entre 97.473 y 204.497 euros.
El Cayenne se supera a sí mismo
El coloso SUV remodela su contorno, actualiza el interior y afina su gama motriz, integrada por dos bloques gasolina y tres soluciones híbridas enchufables (de 354 a 740 CV)
El Cayenne pone buena cara -cambia parrilla y retoca grupos ópticos-, remodela su interior inspirándose en el Taycan y retoca los propulsores. Las mejoras benefician por igual al formato convencional y al más esbelto Coupé. El elenco motriz comienza con dos variantes térmicas y tres híbridas recargables en la red, con potencias de 353 a 740 CV.
El menú comienza con unidades gasolina V6 y V8, que con las mejoras incrementan sensiblemente su rendimiento hasta entregar 353 y 475 CV, respectivamente. Se completa con otras tres alternativas con impulsión mixta enchufable, que no son las que monta Porsche en el Panamera.
El Cayenne arranca con la versión E-Hybrid, que combina un bloque eléctrico con otro a gasolina de seis cilindros (175 y 305 CV) nutrido por una batería de 21,8 kWh, para obtener una potencia conjunta de 470 CV y permitir 74 km sin emisiones de CO2. La versión intermedia S E-Hybrid emplea un motor de explosión más potente y rinde en total 520 CV. La opción superior Turbo E-Hybrid recurre a un V8 gasolina 4.0 biturbo (600 CV), con lo que consigue una potencia total de 740 CV.
El Cayenne, que dispone de múltiples recursos de asistencia a la conducción y de bienestar, despliega su tarifa desde 108.619 a 215.773 euros.
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